Patología y ecografía del compartimento anterior de la cadera
21-07-2024-Tempo Formación
Si en nuestra anterior publicación hablamos sobre la anatomía y visualización normal ecográfica del compartimento anterior de la cadera, hoy vamos a adentrarnos en un tema igual de fascinante: sus patologías. Es como pasar de admirar la tranquila superficie del lago a descubrir los misterios que se esconden en sus profundidades.
Entre las lesiones que vamos a explorar, se encuentran la del líquido articular, el quiste paralabral, la lesión tendinosa y la bursa iliopsoas. La ecografía musculoesquelética nos permite detectar y analizar estas patologías, brindándonos una visión precisa y detallada.
Así que, sin más preámbulos, ¡vamos a sumergirnos en el fascinante mundo de las patologías del compartimento anterior de la cadera!
PD (sí, PD antes de tiempo) - haz click aquí para ver la primera parte de normalidad y ecografía.
Líquido articular
Un derrame articular puede verse como una región de líquido anecoico o hipoecoico que distiende la cápsula anterior. Se puede evaluar midiendo la distancia entre el cuello femoral anterior y la cápsula articular.
Se ha descrito la presencia de derrame articular si la distancia medida es superior a 7 mm o si la distancia es más de 1 mm mayor que en el lado contralateral.
La distensión puede no tener líquido pero puede deberse a sinovitis. El posicionamiento también es importante, ya que la rotación interna puede distorsionar la cápsula, lo que da como resultado un receso engrosado con artefactos de más de 7 mm.
Un derrame articular en un adulto sano y asintomático es poco común.
Sin embargo, en afecciones como la artropatía inflamatoria o la artritis séptica, a menudo se presenta un derrame articular.
Los estudios han demostrado que existe una relación entre la presencia de derrame articular y los signos clínicos.
En esta imagen observamos:
Derrame articular. Imagen ecográfica de eje largo en un paciente adulto, con clínica por derrame articular, que muestra acumulación de líquido articular en el receso articular anterior (flechas).
La presencia de líquido delinea el cartílago (punta de flecha), haciéndolo más visible (signo de visibilidad del cartílago).
Quiste paralabral
Los desgarros del labrum pueden observarse en la posición anterior y la mayoría de los desgarros sintomáticos se observan dentro del cuadrante anterosuperior.
Los hallazgos se manifiestan como una hendidura dentro del labrum anterior, con líquido hipoecoico que se desplaza hacia la región del desgarro.
Además, en las imágenes ecográficas se puede identificar un quiste paralabral asociado como una región hipoecoica bien definida que se encuentra adyacente a la pared acetabular y que a menudo se conecta con el labrum.
En la imagen observamos:
Quiste paralabral anterosuperior en una mujer de 70 años con dolor en la cadera izquierda de 4 meses de evolución. La imagen ecográfica de eje largo a nivel de la cadera muestra una lesión compleja (flechas) que surge del espacio articular. Éste no era compresible con la presión del transductor, lo que aumenta la posibilidad de un quiste paralabral.
Lesión tendinosa
Los desgarros parciales del tendón del iliopsoas tienden a ocurrir en lesiones deportivas. La lesión espontánea de espesor total del tendón del iliopsoas es poco común, pero se ha descrito en ancianos con factores de riesgo asociados que incluyen edad avanzada, uso de esteroides y enfermedades crónicas. Los desgarros suelen ocurrir cerca de la inserción tendinosa, en o cerca del trocánter menor.
En esta imagen observamos:
Avulsión del liopsoas en una mujer de 90 años con sospecha de derrame articular. La ecografía de eje largo a nivel de la cabeza femoral (A) muestra una lesión ecogénica curvilínea con marcada sombra (puntas de flecha) a nivel de la cabeza femoral, lo que plantea la posibilidad de un fragmento de fractura avulsionado probablemente relacionado con el iliopsoas.
Bursa iliopsoas
La bolsa del iliopsoas es una gran bolsa sinovial que se encuentra entre el tendón del iliopsoas y la cápsula anterior de la cadera. Esta es la bolsa más grande del cuerpo humano y se extiende proximalmente debajo del músculo ilíaco hasta el borde pélvico. La bolsa suele estar colapsada y no se observa en estado de normalidad.
La bolsa del iliopsoas frecuentemente se comunica con la articulación de la cadera, por lo que la enfermedad articular y el derrame articular pueden provocar distensión de la bolsa.
En la siguiente imagen observamos:
Líquido de la bolsa iliopsoas en una mujer de 68 años con dolor en la cadera e ingle derecha.. Las imágenes ecográficas de eje largo (A) y eje corto (B) muestran una gran colección de líquido (*) en lo profundo de los vasos femorales.
Bilbiografía:
1. High-resolution ultrasound in the evaluation of the adult hip.
